domingo, 17 de junio de 2012

Ya en las tiendas - Millennium: Los hombres que no amaban a las mujeres


Ya han pasado siete años desde la publicación del primer tomo de la exitosa trilogía póstuma de Stieg Larsson y, sin embargo, a día de hoy aún proyecta una sombra alargada y nítida. Prueba de ello es el éxito de su última adaptación a la gran pantalla, una película escrita por Steven Zaillian y bajo la dirección de David Fincher que, cinco meses después de ser estrenada en las salas de España, al fin está disponible para su compra en DVD (15'99 €) y Blu-Ray (19'99 €). Hoy, en Pase sin entrar, analizaremos el filme y ayudaremos al lector a decidirse por uno u otro formato.

Antes de nada, y como viene siendo habitual, centrémonos en el largometraje. ¿Qué dice de él crítica especializada? Noel Ceballos, de Fotogramas, afirma que este cuento detectivesco de psicosis y romance sucio nunca había tenido una fuerza tan huracanada. Igual de halagüeño se muestra Carlos Marañón (Cinemanía), que asegura que el sello de autor es la diferencia y muestra a Fincher como un maestro del suspense. El resto de las reseñas son similares —Salvador Llopart, de La Vanguardia, habla de un relato (...) sin grasa (...) que vemos como si fuera la primera vez aunque nos sepamos la historia de memoria— y, salvo en algún caso muy concreto (Kyle Smith, del New York Post, que no duda en utilizar la palabra basura durante su exposición), la cinta sale bien parada. Pero en fin, dejémonos de parafrasear a otros y dispongámonos a mojarnos. ¿Qué opinión merece Millenium: Los hombres que no amaban a las mujeres para el autor de este blog? Vamos a verlo.

Si hemos de centrarnos en la factura general de la película, debemos reconocer que está a años luz de aquel telefilme sueco con el que los cinéfilos nos adentramos en la obra de Larsson. La realización de Fincher es más que destacable y, allí donde Niels Arden Opley se conformaba con la corrección, el estadounidense se decanta por la elegancia y la incomodidad buscada. Lo que importa es la tensión, y ésta se consigue por medio de un agobiante estatismo en los planos y el ritmo de las secuencias de investigación (nada que ver, por supuesto, con los de las acción, que buscan lo frenético y lo dinámico), un montaje inteligente y flexible y una apropiada mentalidad de compositor musical (la banda sonora, a cargo de Trent Reznor y Atticus Ross, funciona como un elemento más de la narración, no es un simple adorno, sino todo un recurso estilístico que potencia las sensaciones a evocar; lo mismo ocurre, como observará el espectador, con los silencios). Se persigue, además, la crudeza, pero jamás de un modo escatológico: el sexo es explícito y realista, que no pornográfico, y la violencia, lejos de ser contenida, se manifiesta de forma dura y explícita, sin ningún tipo de pudor. A todo ello ayuda, cómo no, el aprovechamiento dramático de unos paisajes yermos y desoladores, que se ver reforzados por un tratamiento de imagen dispuesto a arrebatarnos el color y entregarnos a la frialdad más absoluta.

El guión no se queda atrás y, si bien omite cierta parte de la historia, se esfuerza por resultar natural, realista y turbador, profundizando mucho más en la psicología de los personajes y en el modo en que estos se relacionan los unos con los otros. Algo que no habría sido posible sin la increíble y camaleónica Rooney Mara /Lisbeth Salander (sin desmerecer al resto del reparto, de gran talento, dentro del cual destaca Daniel Craig (Michael Blomkvist)), que capta la esencia de la sociopatía y la desarrolla de un modo tan impactante como convincente, algo que no ocurría con Noomi Rapace.


Estamos, pues, ante un producto que, aunque no puede considerarse una obra maestra, cumple con todos y cada uno de sus objetivos y logra catapultarnos a un mundo donde la decadencia es una forma de vida. ¿Imprescindible? No. ¿Recomendable? Por supuesto.

¿Y qué decir sobre su versión en DVD y en Blu-Ray. Esta vez, el precio no es motivo suficiente como para hacernos dudar: mientras que la primera sólo nos ofrece un audiocomentario del director, la segunda, con dos discos, ofrece más de cuatro horas de contenido adicional sobre el rodaje: un viaje al mundo interior de los personajes y curiosidades acerca de las localizaciones y la posproducción. Unos extras que, sin duda, harán las delicias del aficionado.


1 comentario:

  1. Estoy bastante de acuerdo con el analisis que haces de esta película, a mi me gustó mucho la de Niels Arden (y tambien las dos de Daniel Alfredson) y creía que esta me iba a decepcionar pero me sorprendió gratamente, ya espero con impaciencia las dos siguientes.
    Por cierto, te animo a seguir dando tu punto de vista sobre películas, porque me parece que aportas una visión muy meditada y bien expuesta, se nota que los post están muy currados. Sigue adelante.

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